Con o Sin Pijama

Con o Sin Pijama

Ante cualquier posible conclusión anticipada, siempre van a existir suficientes y muy buenas razones para dormir con Pijama. El hombre que duerme con pijama muestra carácter partiendo de estos buenos hábitos a la hora del descanso nocturno, y es que dormir muy bien es esencial. Entonces, más que un debate o discusión, se trata de orden, buena apariencia y costumbres correctas. Eso como base de principio para cualquier análisis al respecto de este tema.

Cuestión de Comodidad

Muy sencillo, pero es un hecho que al comenzar a revisar en detalle de entre los motivos más comunes para usar o no un buen pijama, es que predomina mucho el factor comodidad a la hora de hacer la elección de esta importante prenda. Se trata pues de la sensación de obtener cierta comodidad y también protección del frío como factores principales. El objetivo del uso del pijama para dormir entonces tiene que ver con la idea de dormir cubierto, pero sin apretarse.

Efectivamente, es que al elegir un buen pijama lo lógico es establecer algunos parámetros que permitan evaluar desde un pensamiento consiente la ropa de dormir más adecuada e idónea, y de este modo poder facilitar el proceso de tomar una decisión que sea realmente satisfactoria; asi, considerar elementos tales como el clima reinante, el tipo de tela, el diseño y su construcción, serán algunos de estos factores de comparación entre un pijama u otro.

Además, está la sensación de confort que ciertamente ayuda considerablemente a dormir mucho mejor y tener ese descanso tan importante. Entonces, por la mañana, al despertar después de un sueño reparador, pues se sentirán mas descansados y llenos de energía. Ese descanso nocturno proporciona un mayor rendimiento, se reduce altamente el nivel de estrés que también incide en el buen descanso nocturno. Entonces, es sencillo percibir un efecto domino, un círculo vicioso que se puede romper haciendo lo correcto, usar un pijama para dormir. 

Los Caballeros Eligen

Dejando de lado los estereotipos, los hombres tienen todo el derecho a ser exigentes en sus elecciones, incluyendo la ropa de cama. Las tendencias en diseño, colores y telas estan también para responder a las demandas en gustos y preferencias de los hombres en todos los escenarios de la cotidianeidad cada vez más exigentes, para nada simple o desabrido.

Sin embargo, hay un elemento que no se puede desechar o pasar por alto y es la higiene, lo cual es otro punto muy a favor hacia el uso del pijama. Ocurre que en el día a día, la exposición a millones de bacterias es algo común, además de que le ponemos límites con hábitos saludables, en este sentido, ponerse el pijama puede ejercer en gran medida a manera de barrera. 

Por supuesto, es fundamental elegir un pijama que permita la transpiración fluida durante el sueño profundo, que además sea lo suficientemente amplio, es decir que no apriete y que permita la completa libertad de movimiento durante la noche. No es que dormir en pijama sea incomodo, es que no se hace una buena elección y por ende se crea un concepto errado alrededor de uso del pijama.

Dormir Sin Ropa No Es Una Opción

Definitivamente, no se puede restar importancia a ciertos gustos y preferencias que han cultivado cierto arraigo, pues la realidad es que paralelo a lo anterior, si existe otra gran parte de la población que duerme sin pijama. Ahora bien, el argumento principal en muy similar a dormir con el pijama y se sostienen sobre esa sensación de comodidad que se necesita para dormir.

Si como también la temperatura se asocia como un motivo de peso para prescindir del pijama, pues las personas que sufren de calor, esta convencidos de que les resulta muy difícil dormir con alguna prenda. Si este es el caso, bien vale la pena revisar telas y estilos más bien ligeros antes de descartar el uso de un pijama adecuado.

No se puede hacer referencia al común que gusta de dormir en ropa interior, eso implica cierta idea de desorden pues la ropa interior tiene sus funciones, y es más bien algo de sentido común. Es decir, que vestir tiene sus implicaciones pues las prendas de ropa han sido diseñadas cada una para fines muy específicos, asi un bóxer por muy de alta calidad no es apto para dormir, porque no ha sido pensado para eso.

Personalidad del Hombre En Pijamas

Tengamos claro que la imagen del hombre en pijama es la de un caballero de buenas costumbres y hábitos inmejorables, más allá del estereotipo gastado de un conservador aburrido, eso es un hecho. Todo lo contrario, esta costumbre lo que demuestra es un alto sentido de la higiene, pues usar ropa de dormir es la mejor forma de preservar la limpieza en la cama, colchones y sabanas.

El hombre que se acostumbra a dormir en pijama denota seriedad, buen gusto, clase y mucha distinción. Tanto como usar traje, corbata y buen calzado, este hombre es detallista y cree que la imagen es importante en muchos sentidos como parte importante de su personalidad.

Además de los aspectos relacionados íntimamente a la higiene, sencillamente dormir va asociado a la comodidad y el descanso, lo que no quiere decir para nada que un pijama en una tela de seda no sea cómodo, por ejemplo, pero lo cierto es que no es un tejido que sea por costumbre fácil de usar.

Por lo tanto, no se trata de ostentar hasta el mal gusto y a la incomodidad, por lo que de seguro en ese contacto con la piel puede que resulte un poco extraño en la mayoría de los casos, lo cual puede ocasionar dificultad para lograr conciliar el sueño. El algodón en este caso será en definitiva el tejido ideal para elegir un pijama, fresco y adaptable.

Esto lo que quiere decir, es que el hombre debe elegir su ropa de dormir basado en los beneficios en coherencia con la imagen que desee proyectar, asi que cuidado con caer en las exageraciones y la falta de sentido común. La ida de toda esta actitud de hombre de mundo va mucho mejor con el caballero que cuida cada detalle de su persona.

Por último, un hombre en pijama no pasa de moda, no tiene que ver con la edad y no se limita a la ostentación sino a los buenos hábitos y costumbres en todos los aspectos de su vida, del día a la noche, del trabajo diario y de las horas de descanso nocturno.

En resumidas cuentas, no debería someterse a discusión si es necesario o no usar pijama, sino cuales son los factores que se deben considerar para la elección del más adecuado, en cuanto a temas como la tela, el clima, el diseño en su totalidad y porque no los colores y diseños. Las tendencias en moda para caballeros ofrecen distintas perspectivas, es decir que hay para todos los gustos.

Lo que debe quedar de toda esta lectura, es que el hombre que duerme con pijama es mucho más ordenado, saludable y en general de excelentes costumbres, pero   además, descasa mucho mejor y en consecuencia es mucho más productivo, lleno de energía, lo que conlleva a un estilo de vida mucho más pleno.