Estrés Y Ansiedad En El Sueño

Estrés Y Ansiedad En El Sueño

Hablando de descanso nocturno y esas rutinas que son necesarias para lograr alcanzar ese descanso indispensable como factor clave para la salud integral además necesaria para optimizar el desempeño y hacer frente a todas las actividades y retos que trae el día, construir hábitos que estimulen el descanso comenzando con ponerse el mejor pijama.

Ahora bien, como algunos componentes que valen la pena evaluar y que afectaran directamente esta anhelada salud son el estrés y la ansiedad, sin embargo hay que aclarar que son respuestas normales del organismo ante un peligro inminente o la percepción del mismo, es decir que el estrés es necesario como estado de alerta pero en el problema sobreviene con los excesos cuando se convierte en estado permanente, es ahí donde se presentan los problemas.

Entonces, tanto en estrés como la ansiedad permiten generar la alerta y la activación que son necesarias para hacer frente a los peligros o amenazas que se presentes y buscar soluciones.

Problemas que Afectan el Descanso

Entonces, se convierten en un problema real cuando adquieren un elevado nivel o son demasiado intensas o desproporcionadas frente al estímulo que las activa, asi también cuando son demasiado duraderas, es decir que se prolongan en el tiempo aun cuando desaparece ese evento de peligro, reto o por incapacidad para hacerle frente, del mismo modo cuando son reacciones y conductas  demasiado frecuentes.

La respuesta de activación y alerta que desencadenan cuyo objetivo primordial es movilizar recursos para la supervivencia es incompatible con el sueño. Por ese motivo, cuando estas emociones, se mantienen en el tiempo, acaban generando problemas psicofisiológicos como el insomnio.

De estén modo, tano la ansiedad como el estrés, se convierten en uno de los principales factores precipitantes o disparadores de los problemas de insomnio transitorio. También, ha sido comprobado clínicamente una mayor activación tanto desde el nivel fisiológico como cognitivo en aquellas personas que tienen una mayor tendencia frente a los problemas de sueño transitorios con potencial de que se conviertan en crónicos.

En este contexto, se trata de ver el problema de salud y sus posibles soluciones; por otro lado, será esencial considerar que una vez instaurados los problemas de insomnio, en consecuencia, la falta de sueño produce en el organismo una reacción fisiológica que contribuye a aumentar considerablemente estos niveles de ansiedad y estrés presentes, generando un mayor estado de alerta y activación por lo tanto,  mayores dificultades para poder relajarse y conciliar el sueño para poder dormir, en un círculo vicioso que puede ser peligroso.

Estrés y la Ansiedad

Evidentemente, los mecanismos que producen este efecto son en síntesis toda una cascada de acontecimientos biológicos que tienen lugar en nuestro organismo frentes a uno o varios eventos que desencadenan estados de estrés a nivel hormonal y neuronal, por los que se producen estas alteraciones en la segregación de distintas sustancias como el cortisol, el cual inhibe y suprime el sueño, así como también de la prolactina o la serotonina, muy relacionadas con la regulación de los ciclos del sueño, estados anímicos, percepción del dolor, entre otros.

Así se puede observar como el estrés y la ansiedad se convierten en serios desencadenantes del insomnio y a su vez en una terrible consecuencia del mismo, siendo un elemento fundamental a tratar medicamente en los problemas de sueño. Para hablar mucho más claro, se debe entender que, en efecto a lo largo de la vida, inevitablemente van a darse múltiples situaciones que van a producir ansiedad o estrés.

Exactamente estas situaciones que traen cambios, enfermedades, problemas, en fin, la vida está llena de momentos que pueden traer una serie de conflictos y crisis. El objetivo que es de hecho lo más lógico, se enfoca en ajustar esas emociones a la situación que las provoca y actuar en consecuencia y alineados para terminar de estabilizar cuanto antes nuestra actitud con esa emoción.

De ahí que, si lo que está generando estrés está dificultando conciliar el sueño será fundamental abordar las situaciones que originan ansiedad de manera mucho más consiente y si hace falta buscar apoyo profesional. En un ejercicio inicial, el abordaje de estos problemas y situaciones, tendría que dirigirse a los síntomas o situaciones disparadoras más frecuentes, tratando de una forma concreta de intervenir en todo caso en los tres niveles en los que se manifiestan los estados de la ansiedad, es decir desde los pensamientos, respuestas físicas y motoras.

Actitud y Autocontrol

Existen distintas técnicas y métodos de tipo cognitivo como control de pensamiento, reestructuración cognitiva, intención paradójica, auto instrucciones, solución de problemas; y desde el punto de vista fisiológico, como técnicas de relajación, meditación o desactivación física.

Un poco como sugerencias a evaluar y sobre todo de modo preventivo, sería muy conveniente para disminuir considerablemente el riesgo de sufrir problemas asociados a la ansiedad y el estrés, asi como aprender estrategias para aprender a lidiar y afrontar al estrés partiendo de que siempre habrá situaciones que disparen estos estados, de modo que cuando surjan los problemas inherentes a la vida, trabajo, actividad de estudios, entre otros  que de hecho  generan estrés, de manera de desarrollar  esa capacidad que permite hacerle frente de modo mucho más resolutivo y eficiente.

Por ejemplo, una serie de herramientas realmente útiles para la vida tales como planificación del tiempo, procesos de toma de decisiones efectivas o solución de problemas, habilidades sociales y asertividad, técnicas de relajación, desarrollo de autoestima, entre otras.

Rutinas de Descanso

La adecuada gestión del tiempo es uno de los elementos fundamentales que disparan con mucha frecuencia situaciones en estados de estrés y ansiedad. Una buena herramienta es entonces el diseño, la aplicación e implementación de rutinas que permitan optimizar la ejecución de tareas y actividades de toda índole, lo que trae estructura y orden.

Esta rutina debe incluir todas y cada una de las actividades, trabajo, estudio, entretenimiento y descanso. La planificación de rutinas de descanso permite construir hábitos para poder estabilizar y regular los horarios y desde las costumbres poder dedicar el tiempo necesario al sueño en el descanso nocturno.  

En general, el sueño es muy importante y dormir ocho horas en promedio es esencial y de grandes beneficios para la salud. Para una persona promedio, son numerosas las tentaciones que pueden causar tentación y que apartan de la cama, asi como muchas más que las que nos atraen hacia ella, intimidad en el mejor de los casos.

Los pijamas para hombre deberían ser uno de los primeros artículos que deberíamos tener en cuenta en nuestro ritual diario de descanso como parte de esa rutina en la construcción de esos hábitos que se desean instaurar. Esto debido a que estas prendas de vestir han tomado cada vez más importancia en la vida de los caballeros para dormir cómoda y plácidamente bajo las cobijas.

Un hombre que tienen como costumbre el uso de un pijama como prenda para dormir, es por naturaleza muy apegado a sus hábitos, pues forman parte de su carácter y personalidad. Para el entonces la hora del descanso nocturno es tal vez uno de los momentos más esperados e importantes después de un muy largo día que  bien pudo ser muy agitado en el trabajo con todos los retos y responsabilidades que debe afrontar en su día a da.