Inicios del Pijama y Cómo se Adaptó al Hombre Moderno

Inicios del Pijama y Cómo se Adaptó al Hombre Moderno

Cualquier camiseta vieja, pantalón deportivo o bóxer roto ha sido declarado el conjunto predilecto del pijama para dormir o para estar cómodo en el hogar. De esta manera, es como se han vestido los hombres hoy en día, luego de dejar atrás sus pijamas de futbol que la infancia. Pero realmente, los inicios del pijama empezaron de manera muy distinta realmente, y ha dado un giro que totalmente vale la pena evaluar y hablar de cómo esta prenda de ropa está buscando reivindicarse.

El hombre contemporáneo ha adoptado el mismo patrón de conducta en cuanto al uso de pijamas: tienden a combinar una camisa vieja con unos pantalones cortos. Y es que, una encuesta realizada en 2004 por ABC News encontró que, solamente, el 13 por ciento de los hombres usaban prendas de ropa destinadas para descansar, pero, aun así, este porcentaje iba en picada.

¿Y Que paso con los Pijamas?

Entonces, hay que empezar a preguntarnos ¿Qué pasó con los pijamas? ¿Qué se sabe de esas prendas de dos piezas que, por si no lo sabían, brindan un sinfín de beneficios a la hora de dormir?

Pues bien, según historiadores dentro del mundo de la confección textil, aseguran que los pijamas no están muertos. Actualmente, en algún lugar del mundo, los conjuntos de pijamas se están vendiendo a un alto precio. Por supuesto, también existen opciones más económicas, pero sí los hombres las usan o no es un tema distinto.

Aquí, un estudio de la compañía de pijamas Sleep Jones, ha revelado que solo la mitad de sus clientes usan sus pijamas al momento de dormir.

Los pijamas son una declaración de moda ahora”, señalan los expertos en el tema de la moda y el diseño en The New School. Agregan que todavía forman parte del guardarropa de los hombres; la única diferencia es que, es más probable que estás prendas se encuentren en el closet de aquella ciudadanía de clase alta, mientras que los jóvenes promedio de clase media optan por la tan famosa camisa vieja y bóxer.

Inicios del Pijama: ¿Cómo era antes?

Es gracioso, porque así es como empezaron la movida del pijama en sus inicios. Originalmente, los pijamas provienen de la moda india. Durante los días del período británico, los colonos observaron pantalones livianos sin cordón y estaban de acuerdo con que se veían bastante cómodos y muy bien, por lo que se los llevaron a Inglaterra con ellos.

Por ello, entre la clase alta, el pijama se combinaría con una chaqueta para evitar el uso de un camisón.

Anteriormente, los hombres y las mujeres utilizaban lo mismo para ir a dormir. Por una parte, veíamos un camisón que se extendía casi hasta el suelo. Mientras tanto, para la clase baja, observamos la misma prenda, pero esta tendía ser un poco más corta ya que, podría ser la misma camisa que utilizaban para ir a trabajar durante el día.

Tiempo después, veríamos lo que se conoce como “la bata de baño”. Este conjunto se convirtió en una prenda popular entre los ricos que frecuentaban encontrarse en su hogar con sus mismos familiares y amigos. Estaban diseñados con telas hermosas y tenían incluidos diseños intrincados, convirtiéndose así en un símbolo de estatus en toda Europa y América.

En este punto, para la clase baja, seguía manteniéndose el camisón como su principal prenda de dormir, hasta algunas décadas en el siglo XX, ya que sería la forma más cálida de vestir en casa, antes de la calefacción central. El cuello alto, mangas amplias y espinilla media o un poco más larga, sería la opción más viable de mantenerse cálido, a diferencia de los conjuntos de dos piezas. No sería hasta 1920 en donde el pijama abriría un poco más sus horizontes entre las corrientes principales.

Una vez que se impone la calefacción central, la ropa de dormir de repente pasó a tener otro tipo de enfoque y, ahora, se le veía una cuestión de moda, en lugar de ser práctica y los diseños empezaron a reflejar varías tendencias. Si bien al principio se veía mucha influencia del diseño del Medio Oriente, para luego, durante la década de 1930, ver más pijamas con un aspecto más regio, inspiradas sobre todo en la ropa militar rusa.

Década de los 50s

Para 1950, los pijamas elegantes que marcaron pauta estaban siendo reemplazados por prendas con estilos más cómodos e informales hechos con tejidos de punto elásticos en la parte superior y pantalones más finos de paño de algodón. Con esto, básicamente, con las telas más baratas llegó una mayor accesibilidad, marcando la muerte de la camisa de dormir.

A medida que pasaba el tiempo, no solamente las telas evolucionaban, también los colores impuestos; las rayas, lunares y cualquier otro tipo de diseños se abrieron paso en los pijamas. Además, con el auge de la radio y luego la televisión, esta tendencia se vio alimentada y se hablaba mucho sobre que usar para holgazanear en casa.

De los 70s a los 80s

En la década de 1970 las cosas cambiaron y se presenció el resurgimiento de los camisones estilo abuelo y los conjuntos con batas de satén brillantes. Esta década también marcó la curiosa tendencia de la ropa multiusos que, se podía utilizar tanto en el trabajo como en la discoteca. Seguido, surgió la ropa deportiva, aquella que estaba destinada a ser usada en el gimnasio, salió a la calle, especialmente durante la década de 1980 y más allá.

Las reglas de vestimenta ya se habían visto fuertemente alteradas y el conjunto de pijama se convertiría en una víctima. Para 1950 y 1960, un hombre de clase trabajadora podía llegar a casa y caer en una rutina bastante cercana a la de un aristócrata, en la que se quitaba el traje y se ponía un suéter más cómodo, antes de cambiarse para ir a la cama.

Sin embargo, a medida que el ritmo de vida aceleraba, la popularidad del uso de pijamas iba en declive. Desde las décadas de 1970 y 1980 en adelante, era más probable que los hombres regresaron a casa directamente a ponerse par de pantalones de chándal o pantalones cortos y no tenían más razones para cambiarse luego de eso.

Ahora, hoy en día se observa un estilo de vida muchísimo más acelerado, en donde se toma la cena en frente del televisor y se habla por teléfono mientras se está en el baño, rompiendo así todo tipo de reglas de decoro.

Opinión de Expertos

Si bien algunos expertos hablan sobre la caída de las normas convencionales que se conocen, los diseñadores lo señalan como el auge de la democracia. A medida que se va desarrollando una sociedad más abierta y los muros de las clases se derrumban, en conjunto de la pompa y la formalidad.

Quizás, entonces, en una época en dónde perciben la erosión de la democracia, ¿podrían volver los pijamas? Pues bien, hoy en día dentro de la industria de la moda, existe algo llamado “el regreso de la elegancia”, en donde vemos como vuelve la formalidad al momento de vestir.

Durante años, las pasarelas de la moda masculina han sido transitadas por hombres con sudaderas con capucha y pantalones deportivos, pero como antídoto para eso, algunos diseñadores han optado por ir hacia otro lado. Quizás se vea un futuro en otra dirección y puede que reviva aquel atuendo más formal.